Tal y como presentábamos hace ahora un año: tiempo de manejar otro medio expresivo, de plantear nuevos caminos para el arte de la representación visual y de hacer balance de lo editado durante el pasado ejercicio en el mundo del cómic. Sirvan estas líneas como apuntes, como mera introducción a explorar lo que dio de sí el año editorial.
#10 – Vincent – Bárbara Stok – A diferencia de las acostumbradas operaciones editoriales que se sirven de un personaje histórico para vender ejemplares, Bárbara Stok toma un capítulo concreto en la vida de Van Gogh para construir tanto una biografía como un homenaje a la lucha por la libertad artística. El estilo sencillo en el dibujo y la belleza de la paleta de colores de la autora, que convoca el universo expresivo del autor, convierten cada página en homenaje y festival estético.
#09 – Sandman: Overtura / Edición Deluxe – Neil Gaiman, J.H. Williams III – Bastaría echar un vistazo a una sola de las composiciones de páginas de J.H. Williams III, auténticas pinturas interconectadas entre sí, o ni siquiera eso: bastaría con recordar lo que ha conseguido Sandman a lo largo de su historia, la monumental obra de Neil Gaiman, para reconocer que se trata de un imprescindible ahora que se recupera por fin en un solo tomo. Aunque se trata del prólogo a la obra original, resulta mucho más disfrutable cuando se lee como rúbrica final (o, al menos, cuando se lee tras el primer arco argumental de la serie). Otra breve pero inspiradora visita a uno de los mejores universos que ha dado jamás el cómic.
#08 – Un millón de años – David Sánchez – Maravilloso portadista y gran narrador, David Sánchez firma una obra atípica que sigue los avatares de distintos personajes interconectados entre sí en un mundo imaginario, una especie de pasado improbable plagado por criaturas extrañas y por las constantes de lo que el imaginario popular ha querido llamar futuro distópico. En este escenario bizarro, Sánchez se las ingenia para poner sobre la mesa cuestiones en absoluto ligeras con una sorprendente ligeresa en su estilo y en la narración: religión, espiritualidad, vida y muerte se dan la mano en una de la propuestas más crípticas y sugerentes de lo que ha dado de sí el año.
#07 – Llegó la primavera – Kazuo Koike, Goseki Kojima – La editorial ECC recupera otra luminosa obra de los autores culpables de la célebre El lobo solitario y su cachorro. Los dos protagonistas de este relato son dos ancianos que se encuentran y que deciden continuar juntos su camino tras sentir que el mundo ha sumido a ambos en el olvido. El humor se adueña de muchos de sus capítulos, impregnados además del arte de Goseki Kojima, un maestro de la ilustración que se muestra aquí especialmente inspirado, un estado de gracia que se mantiene a lo largo de las entregas de la serie.
#06 – Paper Girls – Brian K. Vaughan, Cliff Chiang – Si bien la serie regular lleva más de un año en publicación, rescatamos la presencia de esta obra por la calidad de muchas de las entregas que han acontecido a lo largo de este año. Para los que comparan alegremente Paper Girls con Stranger Things, por aquello de las bicis, los años ochenta y esta suerte de nuevas goonies, este cómic va algo más allá que la serie de televisión. Aquí no hay nostalgia estéril, al contrario, hay esperanza en el futuro. No es una simple mirada hacia el niño que fuimos y que extraviamos: el niño nos devuelve la mirada para saber en qué nos hemos convertido y a dónde han ido a parar todos sus miedos, sueños, deseos y frustraciones. Una obra imperdible.
#05 – Ether – Matt Kindt, David Rubin – Muy cercana en su argumento a la maravillosa Ciencia oscura de Rick Remender, comparte con aquella la crudeza de sus giros de guión y la representación de un universo fascinante, si bien el apartado gráfico aquí resulta excepcional gracias a la participación de David Rubin, por la inspirada belleza de sus trazos y sus magníficos colores. Una obra provista a la vez de un tono muy gamberro y también de un aliento profundamente trágico y melancólico. Lo que ha conseguido Matt Kindt con esta historia de viajes entre dimensiones y relatos fantásticos promete convertirse en un clásico.
#04 – Un policía en la luna – Tom Gauld – A partir del trazo sencillo y limpio del joven autor, Tom Gauld narra el relato de soledad y vida cotidiana del mundo del presente ambientado en una futurista colonia lunar, en la que un policía continúa con su trabajo a pesar de que la colonia comienza a quedarse vacía. Es sorprendente que un dibujo tan esencial y desprovisto de toda ornamentación sea capaz de transmitir tantas ideas poderosas, gracias a la capacidad narrativa de Gauld para hablar de los sentimientos de los personajes a partir de bellas y sugerentes imágenes.
#03 – The Wicked & The Divine – Kieron Gillen, Jamie McKelvie, Matthew Wilson – Inspirado por la cultura pop y la vorágine del universo de celebrities que lo arrasa todo a su paso, Kieron Gillen ha concebido un relato a medio camino entre la trascendencia de Sandman (Neil Gaiman) y un acercamiento al universo adolescente que brilla por ese deseo de no hacer radiografías ni juicios de valor, sino simplemente acompañar a su personaje. Esta obra, que parece derribar expectativas a cada nuevo número que se publica, parece ser todo aquello que quería ser y nunca llegó a ser Phonogram, la anterior obra de sus autores.
#02 – Saga / Vol.7 – Brian K. Vaughan, Fiona Staples – Séptimo volumen de la obra, en su quinto año de publicación, y posiblemente el más certero, dramático y maduro de todos ellos. Disfrazado de epopeya intergaláctica, un volumen que habla del problema de los refugiados como no ha hecho ninguna otra obra de 2017. La ágil manera de esbozar personajes, la facilidad para aceptarlos, la sangre fría para desprenderse de ellos, la crudeza de todo lo que ocurre… Quizás por eso este cómic haga sentir tan vivo, por ese equilibrio tan conseguido entre ternura y crueldad, esa mezcla de luz y oscuridad tan caótica y hermosa a la vez y que tanto tiene que ver con el ritmo de la realidad que vivimos. Puede que lo que más asombre de Saga sea esa forma de invitar a conmoverse como pocas obras proponen, dentro o fuera del mundo del cómic.
#01 – Black Hammer – Jeff Lemire, Dean Ormston, Dave Stewart – No hay un relato que hable con más amor y más agudo ingenio sobre el mundo de los superhéroes que este Black Hammer, ideado por Jeff Lemire mucho tiempo atrás y que por fin ve la luz. El discurso sobre las posibilidades del medio se construye sobre una emotiva construcción de personajes, un grupo de superhéroes que se queda atrapado en un pueblo y que debe ser paciente hasta encontrarse con una alternativa para escapar. Los personajes, acostumbrados a grandes hazañas diarias, se ven obligados a convivir con una rutina cotidiana con la que nunca han lidiado y eso se convierte en su gran némesis. Uno de los mejores relatos de Lemire y una de las grandes historias del año.