La primera escena de Un toque de violencia parece una declaración de intenciones. Un discurrir caótico de historias cruzadas donde la coreografía parece reivindicar el protagonismo. Pero la película, lejos de plegarse a las prácticas habituales de este subgénero, tan en boga diez años atrás, separa y narra cada historia por separado, apostando por una […]